martes, noviembre 28, 2006

Histeria general

Todavía confío en que existan hombres nobles y atractivos, pero estan por extinguirse.
Pero la plaga crece y prende la llama del hastío que contamina todas las otras innumerables e importantes cosas a las que debo y quiero prestar atención, distintas cuestiones se mexclan inevitablemente y, (más allá de días soleados, noticias emotivas, muestras de fin de año, prefilmaciones, cosas, cosas). Decía, en ese instante, la ¨plaga¨ crece: cada vez soporto menos la ¨viveza criolla¨, en todas sus variantes. Me quiero ir a vivir lejos.
Estoy histérica y todo se mezcla (más que nunca) en este hastío. Como si todas las emociones se condensaran en una sopa y todo fuera un entrenamiento para bancarse lo que venga: buenas y malas, esperadas e inesperadas, alegrías, envidias, recuerdos, autoreproches y quéseyo cuantas cosas más.
Gente que antes no percibía de repente se vuelve molesta y cuanto más trato de evitar a alguien más y más aparece. Ya no tengo amores express ni novios de turno que me traían esa especie de amor inacabable por la masculinidad idealizada.
Ahora, además de ser adulta, estoy más en la tierra. Y estar en la tierra no es fázil.
Es verdad que uno idealiza las vidas de los otros, pero me cansé de caer siempre en el mismo lugar, en las mismas dudas y vicisitudes tanto como me cansé de volver, sea tarde o sea temprano, a la misma casa.
Hace tiempo me identificaba con una canción de mis ex amados Jaime sin tierra llamada Autochocador, y ya no me identifico más con ese espíritu pero algo se sigue repitiendo.
necesito una limpieza profunda de mis residuos. Sí, me averguenzan. Quiero auto-separarme de la contradicción molesta que llevo en mí.