lunes, enero 29, 2007

Amordeceluloide

Ayer escribía en mi cuaderno:
¨Me siento como Amelie en la parte cuando no sabe que hacer, cuando llora y no entiende y siente que no puede lograr eso que quiere.
Pronto voy a estar lejos, si me lo propongo (como diría S.R.S.) voy a estarlo. pero eso tambien es un engaño: no se puede alejar del todo a lo que duele/ a lo que duele y no se entiende/ lo que está añi como una mera verdad ontológica pero que ni para la mente ni para el corazón tiene razón de ser. Yo no estoy hecha para melodramas. Sí, creo que este es un descubrimento, algo que madura por si solo pero que existió siempre, ahí, como una piedra en medio del pecho que no deja respirar, a veces. Una coraza demasiado grande para mi cuerpo cada vez más pequeño.
Y la vida que te toca ahí: justo donde más duele. Yo ya no sé si lo hace a propósito¨.
Ahora digo; quiero ser una historia con final felíz. Su pongamos, por ejemplo, que una mujer simbolize una historia o ficción, me gustaría ser una mezcla de Godard, Antonioni, Cassavettes, Won Kar Wai y Coppola. Una especie de melodrama cool, pero lo más importante es que no se sufra tanto (ni por amor ni por nada). Sino no vale.

viernes, enero 26, 2007

Auto-refractario retrato

Posando como una luciérnaga entre las plantas.

viernes, enero 19, 2007



Lloro porque la existencia me trasciende. Porque irradio cada vez mas luz y eventualmente genero la circunstancia de ¨ser que se expone¨.
Ahora lloro por algo irracional, agridulce, no del todo meloso o romántico.
Basta de idealismos. Estoy cada día mas realista. Existo cada vez más en la tierra, con la raíz enraizada, presente en cada ¨este lugar¨.
Mi carne cobra vida, rebalsa chilla grita, corre habla. Y a veces no le importa. Reluce en su anarquía del desentendimiento. Y ahí, creo, ahí es cuando soy realmente bella.
Porque siento que el universo se está integrando en mí. Cuanto menos lo pienso mas se hace carne, se arrastra en/a mis moléculas y toda ese intelecto/ robot enfurecido de querer plasmar sabiduría se convierte, se vuelve híbrido con aspectos que vienen desde fuera que se integran a mi cuerpo como si no me diera cuenta.
Como si nunca antes los hubiese percibido de esa manera.
Como una gata estratega que percibe y avanza con cuidado. Como la esponja que no deja de sentir, de asimilar, de integrar: la máquina de vivir o algo de eso.

Olvidarse de todo recordarlo y después olvidarlo otra vez. Algo así un training intensivo.
De tanto buscar alivios afuera, de tanto pensar y de tanto querer salir ya no me encuentro.
Sí, negocié parte de mi inteligencia. O al menos mi ¨visión de paralaje¨ como diría Zizek.
Esa creéncia de que sufrir es ganar después la dejé y se la ganaron otros. Y no sé en que espacio situarme, solo por momentos.
La siempre guía intuitiva.
La esponja interna.


Cada vez menos importancia real a lo utópico, al miedo.
Experimentar lo nuevo aunque duela. Es real hasta los niveles mas indómitos e insospechados.
Cavernas de refugio que se extinguen.
Me sentí tantas cosas en estos (pocos? tantos?) años que he vivido.
Mutaciones por adentro y por afuera. A veces (antes) un gran dolor.
De verdad, lo digo ahora. Ahora lo digo. Ahora: no me importa.
Pero no el dejar de importarme como postura, no como consecuencia (eso intento).
Nada más.
Que llorar limpia.
Pero no estoy llorando,
Ahora.

miércoles, enero 17, 2007

Dando vueltas, esperando sin saber...

Es una de mis fotos preferidas, así en general. Me vino a la mente cuando se me ocurrió postear mas imágenes y porque siento que en este momento son mas necesarias y dicen más que la mayoria de las palabras que publico acá (mas que expuestas, por momentos vagas, in´formes o no tan necesarias, mas allá del pleno ejercicio de escritura que se hace a veces cuando uno postea seguido, pero bueno, para eso una especie de diario en el que asumo con felicidad lo informe de mi escribir o de mi escritura.
Ahí está Nan, la compositora de esta imágen. Me pregunto como habrá captado esa imágen tan precisa con un simple automático (a no ser que haya un tercero, lo cual no es probable porque ella fotografiaba sus propios momentos, incluso a ella misma).
Digo: el contraluz en la piel del amante, el instante del detalle del cigarrillo en la boca, la expresión de ella detrás, mirándolo, absolutamente consciente de la lente y a la vez tan protagonista de sus foto-baladas.

El título del post (también lo es de una canción) retrata cierta sensación de mi presente. El que, en algún punto de tantas líneas cruzadas, quizás se unan en uno de aquellos instantes.

viernes, enero 12, 2007

Sophie Call

Exquisite Pain (Count Down - 27)
2000

jueves, enero 11, 2007

It seems to be Cinderellas dancing under the rain. When the dark meeting light. Feeling this sense of being. Of exist there, in every place and every moment: all the dancers making they one. She tryed to make one with the universe and this was all happiness.
She is actually feeling the rain under his neckle, under his head. Freezing the brain. And she get it throw the rain, she love it.
A thash-love princess.
A picnic cinderella.

We really adore dancing. We really love it.
The dancer is like the best lover: the secret answer of so many beauty.

martes, enero 09, 2007

Hurgando en mis archivos de word, encontré esto.....

Busco a alguien de quien no puedo acordarme.
Una línea de puntos sobre el tejado me indica que es hora de salir.
Miro, primero, el exterior hacia la calle cubierta de niebla. El mismo con el cual iniciaré mi periplo que no puedo determinar hacia donde: algún lugar predilecto.
Saldré a caminar las calles de antaño, empezaré por lugares conocidos y poco transitados, intentando re-encontrarlos.
En aquellos rincones casi oscurecidos. Donde sino? Los primeros besos.
Registro todo lo que sentí aquella vez y voy directo hacia ese bar. Aun recuerdo el camino. Todavía siento nervios extremados acerca de quien soy. Tengo una serie de punzadas en la panza, me agitan el corazón por dentro y se desvanecen.
Tengo 23 años y aún lo recuerdo, sensaciones fuertes, como pinzas clavándose en el medio del pecho: el miedo /terror convaleciente a perder al innombrable ser amado. Se recuerda lo más lábil. Solo sé que fue el, el ser que mejor me trató y sé que no podía haber cambiado, que no tenía ni podría haber sido otro que el que ahora imagino. No necesito empecinarme. Todo puede desvanecerse si lo hago.
Para cada quien es fácil recrear opiniones desde afuera.

(….) entonces llegué a casa y cerré la puerta, mojada por la lluvia, y sentí el placer de estar bajo techo y pronta hacia la cama. Sonreí al verla tendida en la semioscuridad del pasillo, antes de prender la lamparita de la meza de luz. Me desvestí en el baño, puse la ropa mojada y sucia de barro en el lavadero. Al cambiarme sentí una especie de renacimiento. Me dirigí hacia la cama, donde permanecí acurrucada escuchando el repiqueteo de la lluvia en la ventana. Como vi que estaba semiabierta la deje así y apagué la luz. Dejé mis ojos abiertos un rato para que se acostumbren a la oscuridad, sino me da miedo dormirme. Hasta que finalmente cerré los ojos y justo, justo en ese momento dejó de llover.

--------------------------------------------------------------

Los primeros amores, sensaciones fuertes como pinzas que se clavan en los corazones que somos. Qué extraño se vuelve intentar recordar este tipo de aconteceres, que distinta materialidad la que nos crea, la que nos urge recomponer adentro nuestro tantas imágenes como espacios internos que nos reflejan hacia afuera.
Momentos viejos que necesitamos o anhelamos repetir, como estadios mágicos, como recuerdos de un tiempo lejanísimo en el cual fuimos todos un todo, un organismo múltiple que se autoabastecía, que sufría pero en conjunto, que amaba pero se repartía el amor.
Individualizar el recuerdo. Me gusta llamarlos momentos placenta, porque son como segundos iluminados por dentro.
Hay muchos momentos placenta dentro del universo. Colectivos, lúdicos momentos.

lunes, enero 08, 2007


Porque soy una buena hermana.

Pero especialmente, porque son lo mas y todo indica que hay que escucharlos.

Aguante El kuelgue!!!

sábado, enero 06, 2007

Será un augurio?

Yo se que algunos vecinos en especial los policías que rodean las cuadras que transito fervientemente, siempre apurada, con la mochila abultada, el pelo abundante y algo desprolijo, la eterna inquieta que parece escaparse al desaparecer entre la gente, deben pensar que quién es esta mina (de las pocas jóvenes que pasan solas o sin carritos con bebés en el barrio, porque ahora n el barrio casi sin excepción todas o tienen hijos, o están embarazadas o estan por embarazarse o, como mínimo, tienen a alguien con quien caminar agarradas de la mano que en la cama algo de bien deben hacer, digo, al menos tienen alguien fijo que las atienda). Entonces como no querer escapar? Cómo no angustiarme si hoy por hoy me tengo solo a mí sola? Realmente le pasa algo. Hay cosas que es terminantemente imposible (al menos x ahora) dejar de hacer. Lo de ayer fue inevitable, digo, era mi primer día de menstruación, es decir, acababa de venirme y por suerte tenía una Siempre libre en la mochila. Siempre estoy cerca para volver, aunque odie esas escasas cuadras. Los ovarios realmente me dolían y eso me vuelve más susceptible.
Especialmente cuando no quiero escuchar ni un comentario, llegando a una esquina unos tipos que creeo que estrenaban un local miran y yo me pongo nerviosa. Decido regresar por esa cuadra, es un súbito ataque de odio, de locura.
-Qué te olvidaste?, escucho. Me enfervorizo.
-Qué carajo te importa imbecil!!
Contesto. Así, gritando mal, sin dudar un segundo. El chabón me sonríe y yo creo que lo voy a trompear en cualquier momento.
- De que mierda te reís, pelotudo? Sos un inútil! Que me mirás?
No me contesta. Detesto la gente como vos (lo dije, el chabón se seguía riendo y cre´pi que lo mataba) que te importa que me olvidé?
Se vuelve a reír.
- Yo no te hablé a vos, me dice.
- entonces qué mierda me hablás?
Me voy siguiendo por la calle que ya había caminado, aunque me sigan doliendo el cuerpo para caminar más, el seguir y doblar y que encima les quedara fácil para mirarme el orto sería demasiado para ese día.

miércoles, enero 03, 2007

Estoy teniendo algunos problemas con Blogspot. Mis amigas, desde afuera, me invitan a dejar andar analizando todo lo que me pasa para transmitirlo. Mas allá de que tienen razón, me multipliqué.
Y hay algo que me llama de todo eso de los disparos.
Ahora también estoy en dispararamansalva.blogspot.com